Las restricciones de movilidad durante el confinamiento tuvieron como consecuencia lógica una bajada importante de los siniestros en las carreteras andaluzas, sin embargo sí se registró durante este periodo un aumento de los excesos de velocidad por parte de conductores que al encontrarse con carreteras prácticamente vacías no respetaron los límites al no percibir el riesgo de colisión, según se desprende de la memoria anual de la Fiscalía Superior de Andalucía, a la que ha tenido acceso Europa Press.
En la memoria, correspondiente al ejercicio 2020, la fiscal superior de Andalucía, Ana Tárrago, analiza la incidencia de la pandemia en el ámbito de la seguridad vial y precisa que en este tiempo se han dictado más de medio centenar de normas en nuestro país con mayor o menor repercusión sobre la movilidad.
La primera de ellas el Real Decreto de Estado de Alarma, que estableció la limitación de la libertad de circulación de las personas, permitiendo solo desplazamientos para determinadas actividades esenciales y debidamente justificadas. La Fiscalía andaluza ha detectado que, a diferencia de los accidentes de tráfico, que descendieron notablemente, durante y después del confinamiento domiciliario "los excesos de velocidad aumentaron".
La Dirección General de Tráfico (DGT) expone en su informe que "la pérdida del hábito de conducir después de tres meses de confinamiento, las ganas por coger el coche y llegar rápido a la segunda residencia o al lugar de vacaciones, incluso sin hacer parada alguna a descansar por miedo al contagio" son factores todos ellos que incrementan la posibilidad de provocar o tener un accidente. Si a esto se le suma que los niveles de tráfico están por debajo a los registrados en el verano anterior, son circunstancias que, según la DGT, "pueden llevar al conductor a no cumplir los límites de velocidad establecidos para llegar antes al destino".
La fiscal superior andaluza destaca que el resumen estadístico nacional "era esperanzador" en cuanto al número de fallecidos, con un descenso del 59 por ciento --del 15 de marzo a 20 de junio-- respecto al mismo período de tiempo del año anterior, pero desgraciadamente en tan solo 16 días ya se había recuperado un 22 por ciento de lo conseguido.
No obstante, en general la pandemia no ha supuesto un incremento de la actividad de los Juzgados y Tribunales de Justicia por delitos contra la Seguridad Vial en Andalucía en tanto que el tránsito de vehículos descendió notablemente --con un pico de hasta un 92 por ciento menos el 4 de abril-- y con ello bajó en la misma proporción la probabilidad de cometer delitos contra la seguridad vial.
Sí se incrementaron las infracciones por exceso de velocidad pero muy pocas han llegado a la vía penal porque solo constituye delito conducir un vehículo de motor o un ciclomotor a velocidad superior a los sesenta kilómetros por hora en vía urbana o en ochenta kilómetros por hora en vía interurbana a la permitida reglamentariamente.