Nadie esperaba que la nueva ministra de Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, fuera a dar una primicia sobre los fosfoyesos en Huelva en su visita de este martes a la capital para inaugurar el XIII Congreso Nacional de Regantes. Pero, al menos, se esperaba que diera la cara aunque fuera para tirar de tópicos. Pues ni una cosa ni la otra. Directamente huyó.
La que fuera alto cargo de Fertiberia, empresa sentenciada por el delito medioambiental en las marismas onubenses, llegó a la Casa Colón minutos antes de las nueve y media de la mañana, hora a la que se había convocado a los medios. En ese momento, sus asesores de comunicación comunicaron a los numerosos periodistas presentes que la gobernanta atendería a la prensa una vez concluyera el acto inaugural del congreso. Eso sí, debido a que García Tejerina tenía que regresar a Madrid para asistir al Senado, pidieron que sólo fueran dos las preguntas que se le formularan.
Los periodistas consensuaron que preguntarían en clave local sobre los fosfoyesos y en clave nacional sobre el hotel de El Algarrobico. Acabada su intervención en el Palacio de Congresos, la prensa se preparó para el fugaz encuentro con la ministra. Tan fugaz que ni fue. Salió por la puerta de atrás de la Casa Colón y dejó colgado a los periodistas, que decidieron, como medida de protesta, escenificar una foto con micrófonos caídos.
García Tejerina se fue de Huelva como llegó. Sin nada que decir sobre si el ministerio que ahora dirige va a presionar de una vez por todas para que Fertiberia cumpla la sentencia que la obliga a restaurar la zona masacrada en 1.200 hectáreas de marismas onubenses condenadas a ser uno de los espacios más contaminados de Europa. Y se fue con una acción con la que dejó tirada a la prensa onubense y, por consiguiente, a sus ciudadanos.
Mesa de la Ría
Pero no sólo fue la prensa la que se quedó con los micrófonos colgados. En las puertas de la Casa Colón, representantes de la Mesa de la Ría esperaban que García Tejerina les atendiera algunos minutos, algo que habían solicitado por escrito en la Subdelegación del Gobierno. Ni la vieron.
Los representantes del colectivo ciudadano, que estuvieron custodiados por la Policía durante todo su acto de protesta, insistieron en pedir a través de los medios a la ministra que haga que Fertiberia ejecute la sentencia de la Audiencia Nacional “en todos sus términos”. En declaraciones a los periodistas, Rafael Gavilán, portavoz del colectivo ha lamentado que la ministra no se haya reunido con ellos. Ha explicado que habían solicitado mantener un encuentro con ella durante la jornada de este martes en la Subdelegación del Gobierno para abordar este asunto, sin embargo, se les ha emplazado al próximo viernes a reunirse con el secretario de Estado. Gavilán ha recordado que en la sentencia se instaba a la paralización de vertidos por parte de Fertiberia, algo que ya se produjo a finales del 2010, y a la limpieza de las balsas “retirando todo lo que se ha depositado indebidamente”, un aspecto que aún no se ha cumplido. Así, reclaman a la ministra que “no acepte el proyecto de la empresa de cubrir con una capa de tierra todos estos residuos químicos” porque “eso no es lo que quieren los ciudadanos y además no se cumpliría con la legalidad”.
IU afea lo hecho por la ministra y le pide “máxima implicación”
La coordinadora del Área de Medio Ambiente de Izquierda Unida en Andalucía, Josefa Beiras, criticó este martes que la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, “se olvide” de los fosfoyesos en su visita a Huelva y ha exigido “la máxima implicación” para la restauración a las administraciones y a la empresa Fertiberia.
Beiras ha lamentado que “venga a Huelva y se olvide completamente de conocer de primera mano y personalmente la situación de las balsas de fosfoyesos, que es el mayor vertedero de residuos industriales de toda Europa”.
A su juicio, esta decisión de la ministra “demuestra que, ante este grave problema medioambiental que tiene Huleva, mantiene la estrategia del avestruz para tratar de obviar un asunto que es motivo de preocupación y alarma para la ciudadanía”.
No obstante, Beiras duda de que esta ministra, “que era un cargo directivo de Fertiberia, tenga la voluntad para asumir la implicación que le exigimos desde Izquierda Unida y buscar soluciones entre todos al problema de los fosfoyesos”. Por ello, considera que “será la movilización ciudadana de la gente de Huelva la que la obligue a ello”. “La restauración de las balsas de fosfoyesos se tiene que convertir en una importante fuente de empleo para Huelva”, dijo Beiras.
