Dos ciudades esperan para conocer si organizarán o no la próxima edición de la Copa de España de Fútbol Sala. La mejor posicionada para ello es Granada
. La localidad nazarí cuenta con un aforo superior a las 8.000 personas en su Palacio de Deportes y experiencia más que contrastada en la realización de este tipo de eventos.
Sin ir más lejos el año pasado fue la sede de la Copa del Rey de baloncesto, un torneo muy similar al que empieza a organizar la RFEF y que
se celebrará entre el 9 y el 12 de febrero de 2023. Granada es la principal opción para la Federación. Tanto es así que ya ha contactado con empresas granadinas para interesarse por algunos de los servicios que se necesitarán alrededor del pabellón durante la competición.
Pero
está habiendo escollos con el Ayuntamiento local (en el entorno granadino no son tan optimistas como en la RFEF de que el evento se celebre allí) y es por eso que la decisión no está tomada en firme. De hecho esta redacción ha podido saber, de fuentes muy cercanas a la RFEF, que en la recámara está Ciudad Real, otra ciudad que sabe de sobra lo que es acoger eventos de la élite del fútbol sala nacional.
Historia
Quedan menos de dos meses para la celebración del torneo por lo que la decisión debe ser inminente para comenzar con los preparativos.
Sea donde sea el Jaén Paraíso Interior FS no se sentirá en un extraño. Si finalmente el torneo se jugase en el Palacio de los Deportes granadino, los amarillos volvería a un escenario en el que ya jugaron unas semifinales del play off por el título de liga ante Movistar Inter.
Fue en mayo de 2018 y por entonces el Olivo Arena apenas era un proyecto.
Con Ciudad Real hay más sentimientos de por medio. Allí, en 2015, nació el ‘olivo mecánico’. Así se apodó al Jaén Paraíso Interior FS que se convirtió por primer vez en campeón de España. Aquel mismo año acabó cayendo en el mismo escenario en la Supercopa de España y ya no volvería allí hasta el año 2017 cuando se jugó allí una Copa de España. En 2019 jugó por última vez el Jaén Paraíso Interior FS en Ciudad Real. Lo hizo en la final four de la Copa del Rey, perdiendo la final ante el FC Barcelona.