Los artesanos del pan jiennense no pueden más. Es lo que han denunciado esta mañana a las puertas de la Subdelegación del Gobierno de Jaén. Aseguran que la situación económica que están atravesando es “insostenible” pues explican que sus costes de producción, por la guerra en Ucrania, “han aumentado en un 80 por ciento” y estos costes no se están pudiendo traducir al precio del pan porque de hacerlo sería inasumible para muchos jiennenses.
José Antonio García Franco, presidente de la Asociación Provincial de Fabricantes y Expendedores de Pan de Jaén, aclara que “el precio medio de una barra de pan ronda los 90 céntimos y el precio que debería tener para que diese unos beneficios mínimos debería ser de 1,40 euros”. “Estamos comprando la harina prácticamente al doble del precio al que se encontraba el año pasado. El combustible y la electricidad también se han multiplicado”, denuncia Franco.
Apostilla además el presidente de los panaderos que “los grandes centros comerciales están usando el pan como un producto de reclamo” y que el precio de la harina no ha descendido “a pesar de que en las últimas semanas el del trigo sí lo ha hecho”. Son 500 las panaderías artesanales que hay en la provincia de Jaén y avisan de que debido a esta situación “son varias las que han cerrado y muchas más las que cerrarán si la situación continúa siendo la misma”. Concretamente en la capital ya han cerrado cinco establecimientos de este tipo.
Demandan ayuda a las administraciones pues afirman que les han dejado “de la mano de Dios”. “La panadería artesanal ofrece un producto milenario, de toda la vida, y no puede competir en precios con las grandes superficies. Llevamos ocho o nueve meses a pérdidas”, añade Franco quien cuenta que hace cinco meses se reunieron con la Subdelegación para solicitar ayudas para el sector, pero estas no llegan.
“Estamos hablando de negocios de muchas generaciones que hoy no son rentables. Y a eso se añade además que no hay relevo generacional, porque es un oficio muy sacrificado que no atrae a los jóvenes”, apostilló el presidente de la Asociación Provincial de Fabricantes y Expendedores de Pan que solicita descuentos en la energía como ya ocurre con otros sectores estratégicos.