Desde primeros de año la Cámara de Comercio se ha instalado en la planta sótano del Vivero de Empresas, en la carretera de Madrid. Su sede de la calle Hurtado ya está alquilada al bufete Medina Cuadros, que paga alrededor de 9.000 euros al mes. Sin embargo,  la centenaria Corporación de Derecho Público debe afrontar al mes una hipoteca de 16.000 euros, entre otros gastos. Por el momento, la dirección de la Cámara no ha llegado a ningún acuerdo con las entidades bancarias para que adelanten el dinero del alquiler y poder hacer frente así al pago, al menos de las nóminas de los trabajadores. Actualmente quedan 16 de los 47 empleados que tenía  la Cámara de Comercio antes de que comenzaran los problemas de tesorería, todos ellos sin cobrar desde el mes de mayo. El resto, o se han marchado o están dentro de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo.
Ante esta situación, los trabajadores estudian iniciar protestas si a lo largo de esta semana no se les da una solución de futuro. Tras el traslado, las fuentes consultadas indican que la dirección de la Cámara de Comercio pretende alquilar también el Vivero de Empresas al Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE), cuyas negociaciones están muy avanzadas, aseguran, después de lo que   se trasladarían definitivamente al  edificio Impulsa, que ya está finalizado, al lado del Emplaza, en el Polígono de Los Olivares.