Así las cosas, se procedió a tomar los datos a dicha persona, a la que en los próximas días se citará en el Ayuntamiento al objeto de darle audiencia y ver qué documentos puede aportar que acrediten los derechos que crea tener.
El delegado de Patrimonio, Gabriel Orihuela, ha manifestado que la actuación no se detiene, sino que se retrotrae a una fase anterior “para oír a este ciudadano en lo que tenga que decir, ya que no se trata de avasallar a nadie”. No obstante opinó que “las construcciones dispersas que se han visto tendrán difícil justificación para que estén allí donde se encuentran, ya que parecen absolutamente incompatibles con un parque natural”.
El Ayuntamiento de Algeciras, a través de la Delegación Municipal de Patrimonio, dio orden para que personal municipal llevara a cabo el desmantelamiento de un asentamiento localizado en el monte público de Las Corzas, suelo no urbanizable de especial protección que se localiza en el corazón del parque natural Los Alcornocales.
Fue la Policía Urbanismo la que detectó hace unos meses el asentamiento, en el que se han levantado varias edificaciones con elementos de derribo y se ha cercado en precario un espacio de unos dos mil metros cuadrados con alambres y material de desecho.
El Ayuntamiento intentó saber quienes habían realizado las construcciones, para qué y con qué derecho. Para ello la Policía Urbanística realizó varias visitas sin encontrar nunca a nadie, ni tampoco hubo personación alguna cuando se publicó tanto en el Boletín Oficial de la Provincia como en el tablón de anuncios tal y como establece la ley para intentar dirimir si existe alguien con algún tipo de derecho sobre ese espacio.
Una vez concluido el procedimiento legal, los asesores jurídicos municipales consideraron que se podía llevar a cabo el desmontaje y demolición con todas las garantías legales, y volver el terreno a su estado original, lo que el delegado de Patrimonio, Gabriel Orihuela, ordenó que se empezara a realizar. “Se trata de unos terrenos en pleno corazón de los Alcornocales, en un sitio muy sensible, y no se pueden ni se deben permitir actuaciones como las mencionadas porque, además de la usurpación de un monte público, supone un atentado contra el medio ambiente por los riesgos de incendios y la contaminación ambiental”, explicó el delegado.
