La nueva Ordenanza del Ruido se ha adaptado a la normativa autonómica, que establece los niveles que no deben superarse en cada vía pública para decretar una zona como acústicamente saturada (ZAS), pero además establece una regulación más pormenorizada de cómo se seguirá el procedimiento puesto que se va a ampliar la regulación. En este sentido, la normativa se limita a exigir el cumplimiento de la ley, “que dice que cuando hay una acumulación de actividades que puedan generar ruido y se superen niveles generales de contaminación acústica se establecerán medidas en el plan zonal para revertir esos datos”, apunta el delegado municipal de Medio Ambiente, Jaime Espinar.
A este respecto, señala que “eso es lo que hemos hecho en la calle Algarve y Santa Ana, donde ya no pueden concederse nuevas licencias de actividad que generen más ruido del actual. En un mes tendremos la resolución, así como la actualización de la de las calles Tornería, plaza Vargas y calle Caballeros, ya declaradas como zonas ZAS, puesto que desde 2017 no se hacía”.
Actualmente el Área de Medio Ambiente no tiene prevista la delimitación de ninguna nueva zona ZAS en la ciudad, pero Espinar admite que sí están “muy vigilantes” en todo lo que respecta al entorno de la avenida de México: “Trabajamos en revertir la situación que nos hemos encontrado, y no se descarta que en un futuro puedan limitarse las actividades recreativas que puedan generar ruido en esta zona de Jerez”, expone.
Hay que recordar que los vecinos de la zona de la avenida de México han trasladado al Ayuntamiento en varias ocasiones sus quejas por la actividad de los establecimientos de ocio existentes, e incluso el pasado año interpusieron reclamaciones contra la apertura de un nuevo bar de copas. Además, exigían mayor seguridad por altercados violentos en la calle, así como por el ejercicio de la prostitución.
En paralelo a estos hechos, el Ayuntamiento también está a la espera de licitar en breve el nuevo Mapa del Ruido de la ciudad, que se encuentra caducado desde hace un par de años. Ese documento será el que establezca los niveles de ruido que debe haber en cada zona de Jerez, dependiendo de si es zona rural, residencial, en función del suelo… “Ese Mapa vertebrará la ciudad en cuanto a niveles de ruido y las medidas que hay que poner en marcha para que no haya contaminación acústica, sin limitar la actividad económica en exceso”, señala el delegado.