El PSOE cree que los “fantasmas” con los que el PP crea su discurso en torno a la recuperación de la soberanía de Gibraltar “no se sostienen”, pero, a la vista del debate y votación hoy de una proposición no de Ley popular y otra socialista sobre este asunto, confía en llegar a un acuerdo con la oposición que permita que las Cortes Generales den un “mandato claro” al Gobierno para negociar la soberanía del Peñón.
En una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados para presentar su iniciativa, el diputado nacional socialista Rafael Román señaló que la coincidencia de dos iniciativas firmadas por cada uno de los grupos mayoritarios es una “anomalía” porque, a su juicio, el partido de la oposición está “obligado” a respaldar al Gobierno.
En este sentido, Román, junto a su compañero Salvador de la Encina, señaló que, hasta última hora de hoy, negociarán con los populares un texto conjunto que llevar a la comisión para que el Parlamento pueda dar al Gobierno un “mandato claro” en el que se le pida que negocie la soberanía de Gibraltar.
De la Encina se mostró más optimista y confió en que, a pesar de las reacciones de los últimos tiempos, el PP sea “sensible a este tema”, mientras que el primero desconfió de si este partido “buscará la confrontación”.
Más allá del resultado de la iniciativa de hoy, el Gobierno “no ha abandonado ni abandonará su reivindicación sobre Gibraltar”, explicó De la Encina al tiempo que Román recordó que las demandas de la soberanía están excluidas del Foro de Diálogo e incluidas en el Proceso de Bruselas que, según dijo sigue, “diplomáticamente vivo” aunque lleve “algún tiempo” sin registrar negociaciones.
Román cree que en su proposición el PP se ha “inventado unos supuestos inexistentes” a partir de los cuales “construye un discurso” alertando del supuesto retroceso español en la lucha por la soberanía, las aguas, la jurisdicción sobre el istmo o en materia militar y de la “carta de igualdad” que el Foro de Diálogo habría dado al Gobierno de Gibraltar respecto al español o al de Reino Unido. Esa actitud es, según Román, “una mera excusa para atacar al Gobierno”.
Los populares quieren que el Gobierno tenga una política “más aguerrida y más firme” en la soberanía de Gibraltar pero para el PSOE eso sería “una vuelta al pasado”. Para los socialistas, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, ya llevan a cabo una “correcta política de población” a través de un “clima de confianza” que ahuyenta las “tentaciones aislacionistas y numantinas en Gibraltar”.
Negociación sin anacronismos
A su juicio, se aplican las “mismas recetas” que se piden en otras zonas del mundo, “diálogo, cooperación y entendimiento” sin que la población de la zona sea “rehén de los intereses de Estado”. “Las negociaciones de Gibraltar seguirán adelante pero no tomando posturas anacrónicas o inmovilistas”, añadió.
Para el diputado socialista, además de no sostenerse “con la realidad”, los “fantasmas que crea el PP” no van en la buena dirección porque no ofrecen un “respaldo sin fisuras” al Gobierno central sobre un tema que une “al 99 por ciento, por no decir al 100 por cien, de los españoles”.
El PP pide sensatez
Por su parte el diputado nacional del PP José Ignacio Landaluce pidió ayer al grupo parlamentario socialista que actúe con “sensatez” apoyando la proposición no de ley de los populares que se votará hoy en la Comisión de Asuntos Exteriores sobre la soberanía de Gibraltar, iniciativa que, según dijo, estarían dispuestos a “limar”.
En declaraciones a los periodistas en la Cámara baja, Landaluce no concretó hasta qué punto el PP cedería en su iniciativa aunque sí dejó abierta la posibilidad a que “haya que limar algo” de su texto.
Al respecto, recordó que la iniciativa ya ha “dejado de lado” las prácticas medioambientales o de crecimiento sobre aguas que pertenecen a España que lleva a cabo la colonia británica.
El parlamentario subrayó que el PP quiere hacer “frente común” para que España tenga una posición “fuerte y contundente” ante Reino Unido y Gibraltar, de ahí que confíe en la “sensatez” de los socialistas para que el interés de los españoles y los gibraltareños prime sobre el del “amigo Caruana”.
“Si hace falta buscaremos y seguiremos trabajando porque hasta hoy no hemos recibido ni una sola respuesta ni llamada del PSOE”, lamentó Landaluce, quien reclamó un tirón de orejas al Gobierno pero, especialmente “una causa común” por los intereses del país.
Landaluce reprochó al Ejecutivo la falta de contundencia ante la “afrenta” vivida con la reciente visita de la princesa Ana de Inglaterra, la permisividad ante las grandes ampliaciones que a través de rellenos ganados al mar en aguas españolas, o los accidentes medioambientales y criticó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no cuestionara al primer ministro británico, Gordon Brown, por Gibraltar cuando el G-20 abordó en recientes reuniones la erradicación de los paraísos fiscales.
El diputado relató las concesiones que a su juicio ha realizado Zapatero a Gibraltar durante los cinco años de gobierno socialista y que han convertido a España en el “hazmerreír de la comunidad internacional”.
“Los gibraltareños ya tienen estatus de nación y el Gobierno de Zapatero les ha concedido voz, veto y voto, lo que es muy perjudicial para el gobierno de España”. A cambio, cree que el Gobierno del Peñón “ha llegado a la situación de mordernos la mano”, lamentó.
A su juicio, recuperar la soberanía de Gibraltar “siempre ha sido complicado” pero desde que gobierna del PSOE, ese “sueño” está “más lejos que nunca”.
Recordó finalmente Landaluce que la iniciativa del PP fue presentada hace ya casi nueve meses, lo que dura “un largo embarazo” que ahora el PSOE “ha intentado abortar” tratando, además, “de quitarle al PP la paternidad de esa proposición”.