El Gobierno local rindió ayer cuentas del destino final de los 80 millones de euros ingresados como consecuencia de la concesión administrativa de la gestión del ciclo integral del agua, que como se sabe explota la compañía Aqualia desde hace algo más de un año.
El delegado municipal de Economía, Enrique Espinosa, desglosó el destino de esos fondos en el seno de la comisión permanente de control y seguimiento presupuestario. Según los datos ofrecidos por el propio Ejecutivo local, el 74 por ciento de esos 80 millones de euros ha permitido hacer frente al pago de deuda financiera.
Así, 28 millones se destinaron a la condonación de un préstamo que Ajemsa tenía con Unicaja; mientras que otros 10,6 millones sirvieron para cancelar varias operaciones de tesorería que el Ayuntamiento mantenía con Catalunya Banc. Esta última operación ha permitido reducir sustancialmente la deuda que se mantenía con esa entidad financiera, que reclamaba algo más de 23 millones de euros incluyendo los correspondientes intereses de demora, por lo que ha accedido a una quita en favor del Consistorio de 12,4 millones.
Además, se ha pagado la operación de tesorería que el Ayuntamiento tenía comprometida con CaixaBank, por importe de 6,1 millones de principal, habiéndose negociado igualmente la quita de la totalidad de los intereses, que habrían ascendido a 732.000 euros.
Asimismo, las obligaciones de pago del préstamo sindicado se han puesto al día en abril del ejercicio corriente, habiéndose pagado 14,6 millones de euros.
El dinero sobrante se destina a dar respuesta a demandas históricas de los vecinos, enmarcadas en el Plan de Actuación 2014-2015, que ya se está desarrollando y que contempla la ejecución de 40 obras en distintos puntos de la ciudad. A este capítulo inversor se destinan más de 20 millones de euros.
Un ahorro de 34,4 millones de euros
Las medidas de control del gasto puestas en marcha por el Gobierno local han permitido acumular hasta ahora un ahorro efectivo de 34,4 millones, según los datos ofrecidos ayer por Espinosa.
