Una sola mujer fue traicionada por el sueño, el viento y la promesa, dice Ovidio de Ariadna, "luz del señor" y tejedora solitaria, un mito que la bailaora Rafaela Carrasco recupera para denunciar el patriarcado y con el que este viernes se inaugura el Festival de Jerez.
El "epicentro" del flamenco, como lo describen los organizadores del certamen gaditano, propone en esta ocasión al público de 34 países "saltar al vacío" con su programación, que incluye el primer espectáculo que firma el nuevo director artístico del Ballet Nacional de España (BNE), Rubén Olmo, que lo clausurará.
"Estoy muy contenta con ser yo la que lo inaugure pero es que, además, en el estreno del BNE que clausurará Olmo, yo he coreografiado el 'Romance del emplazado' y he sido la maestra repetidora en otras tres piezas", ha detallado la sevillana (1972).
"Ariadna (Al hilo del mito)" es un espectáculo con dramaturgia de Álvaro Tato, que acaba de estrenar para la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) "Andanzas y entremeses de Juan Rana", y que tiene como hilo conductor un relato "que va contando Carmelo Gómez en off como si fuera un cuento para niños".
Se trata de "una sola mujer entre varones" que sueña por su independencia y lucha por su libertad cuando el amor se cruza en su vida, condensado el mito clásico en sus elementos esenciales y visto desde la perspectiva femenina.
Es, detalla, un viaje flamenco a través de la relación que hay entre los mitos, leyendas y fábulas con el ser humano, "nuestra conexión con ellas y con los miedos y anhelos ancestrales", explica.
Carrasco está en el escenario sola con diez hombres -cuatro bailarines y seis músicos-, "una imagen muy impactante porque muestra la vulnerabilidad y a la vez la fuerza y valentía de Ariadna que va desarrollando distintos perfiles".
Parten musical y coreográficamente del flamenco, porque ese es, reivindica, "su vocabulario", con composiciones que van todas ellas "dirigidas a la emoción" y que firman Antonio Campos y Jesús Torres.
"Empezamos por la tragedia, por el abandono de Ariadna en Naxos, que va por peteneras y luego llega el bloque del padre, que se hace con la familia de la soleá, bulería, jaleo y romance, porque es un mundo de hombres, muy masculino y autoritario".
El tercer bloque del espectáculo, con dirección musical de Jesús Torres, es el del amor, con diferentes pasos a dos de milongas, tientos y un corrido y la cuarta parte es "el laberinto", con seguiriyas, tonás y martinetes.
"El final no es trágico porque en el mito aparecen diferentes posibilidades. Volvemos a jugar con la petenera pero con la mexicana y la sefardí, por ejemplo", detalla Carrasco que también ha hecho con Tato "Nacida sombra", con la voz en off de Blanca Portillo.
"Estamos jugando un poco con el mito de Ariadna, con la tragedia griega. Reflejamos diferentes estados emocionales del ser humano y nos agarramos a los momentos más potentes como son el abandono, el patriarcado, el amor y el miedo, como un viaje al interior de nosotros mismos".
En este momento, asegura, es este tipo de producciones el que más le interesa porque se mete "en un mundo onírico" abierto a muchas posibilidades creativas: "te documentas y estudias para dar con las claves y detalles del momento y eso me parece más rico y delicado aunque también sea más complicado".
En el escenario está acompañada al baile por Rafael Ramírez, Gabriel Matías, Ricardo Moro y Felipe Clivio, a la guitarra por Jesús Torres y Salvador Gutiérrez y al cante por Antonio Campos y Miguel Ortega.
"Ariadna (Al hilo del mito)" irá después de Jerez al Festival de Guitarra de Córdoba y al francés de Mont-de-Marsan antes de iniciar una gira por España a partir de septiembre.
La despedida de El Cabrero
Tras Rafaela Carrasco, llevará el turno del cante de José Domínguez ‘El Cabrero’ en la Bodega González Byass, dentro del ciclo ‘De la raíz’, que cuenta con el patrocinio de CajaSur. Tras cuarenta y seis años de trayectoria artística, el cantaor sevillano desgranará los temas de su último trabajo discográfico (‘Ni rienda ni jierro encima’) con el que ha decidido iniciar su gira de despedida de los escenarios.
Un nuevo disco que ratifica su fidelidad al espíritu con que se inició en el cante desde el profundo respecto al flamenco tradicional con textos de disconformidad y rabiosa actualidad. Todo ello unido a una voz singular y una personalidad arrolladora. En la Bodega González Byass El Cabrero estará acompañado por la guitarra de Manuel Herrera.
Pastor de cabras desde la infancia, El Cabrero inició su andadura artística en 1972 con La Cuadra de Sevilla. En 1975 grabó su primer disco y en 1980 su presencia se hace habitual en todos los grandes festivales de Andalucía.