La Hermandad de la Clemencia va a someter a cabildo una serie de modificaciones en su hábito nazareno, en una sesión de carácter extraordinario que se celebrará una vez lo permita la situación sanitaria.
Se trata de “completar” la túnica actual, respetando su identidad pero realzando la vinculación con la parroquia de San Benito. Así, se propone como elemento más destacado la incorporación de un escapulario benedictino de color burdeos.
Al mismo tiempo se aprovecha para introducir variantes en un hábito que fue concebido cuando la hermandad hacía estación de penitencia a la parroquia del Pilar en la tarde del Sábado Santo.
Dado que el itinerario actual es más largo y que los nazarenos ya no portan el cirio al cuadril, el cinturón de esparto se sustituye por un cíngulo con borlón de color oro. De igual modo, la sandalia negra se sustituye por un zapato cerrado con hebilla de este mismo color.
El boceto ha sido realizado por Miguel Ángel Segura y será sometido a la consideración del cabildo de hermanos en cuanto las condiciones sanitarias lo permitan.