El tribunal considera que no solo no ha quedado acreditado que fuese cometido por la acusada sino que existe la duda de dónde se inició
Una mujer ha sido absuelta por el Juzgado de lo Penal número 5 de Málaga de un delito de incendio forestal por imprudencia en el que se quemaron más de 500 hectáreas en Casares (Málaga) debido a que no solo no ha quedado acreditado que fuese cometido por la acusada sino que existe la duda de dónde se inició.
La fiscalía malagueña la consideraba autora y pedía dos años de prisión aunque la mujer siempre ha mantenido su inocencia y sostenía que el fuego no se inició en su finca, algo que ahora en sentencia se indica que existe "la duda razonable" de que se iniciara fuera de su parcela, según la sentencia, a la que ha tenido acceso EFE.
También está la duda de la autoría del incendio y el magistrado señala que fue la propia acusada y su familia la que en fechas anteriores pero próximas denunciaron convenientemente que en la valla por la parte exterior se habían producido varios incendios que no llegaron a propagarse.
El juez aplica el principio de in dubio pro reo y absuelve a la acusada al tiempo que indica que el incendio se produjo en un momento considerado de alto riesgo medioambiental, con unas condiciones de calor, humedad y viento que favorecían la propagación.
Tampoco ninguna persona la observó cometiendo el incendio y se trata de una zona con fácil acceso, con carretera asfaltada y en el que se habían producido tres incendios, entre abril y septiembre de 2009, en la zona exterior de la valla que fueron denunciados por la acusada y su marido y de los que se desconoce la persona que pudo producirlos.
El incendio que abrió este procedimiento se produjo el 9 de septiembre de 2009 en el paraje Los Pedregales y se extendió a parcelas del término municipal de Casares (Málaga), siendo necesarios para su extinción medios técnicos, tanto terrestres como aéreos, y humanos.
El fuego afectó a 524 hectáreas de terreno forestal y se necesitó cinco días para extinguirlo.