Durante el presente siglo, el Málaga persigue un proyecto que en estos tiempos empieza a ser obligatorio. En un club con una gran importancia de la cantera, tener la ansiada ciudad deportiva, que se conocerá como La Academia, está siendo un arduo trabajo. Parones de por medio, retrasos y baile de fechas.
A julio de 2022, los trabajos no paran y hay muchas infraestructuras subterráneas que se escapan a nuestra vista, aunque la sensación es de un avance lento.
Con el acuerdo con el fondo de inversión CVC, el Málaga recibirá fondos repartidos en 2022, 2023 y 2024 y el 75% del dinero tendrá que ir para la mejora de infraestructuras. El impulso de CVC pisó el acelerador de las obras.
Pero, como si de una pregunta al árbitro se tratara, ¿cuánto queda? Esto decía el administrador judicial, José María Muñoz, el pasado mes de abril: “Nuestra previsión es que la primera fase esté finalizada para diciembre. Son tres fases, ya se hiza la subfase primera, estamos acomodando la primera fase con el arquitecto, se sigue trabajando en ella a menor ritmo y se incrementará a partir de mayo”.
Seis meses de retraso
La primera fase significa la construcción de tres campos de fútbol de los ocho que habrá en total. Con sus respectivos vestuarios y zonas necesarias para la práctica deportiva. Las previsiones del club estaban en dejarlo listo para diciembre y que en enero de 2023 ya pudiera entrenar el Atlético Malagueño y el juvenil.
Sin embargo, la obra está teniendo un retraso de seis meses. Según confirma el arquitecto, Salvador Cortés, hasta después del verano de 2023 no estará lista esa primera fase. Esto es debido al mal momento del sector de la construcción por la falta de suministros, los retrasos en la financiación y problemas con unas tuberías de reciclaje que no llegaban.
Mientras tanto, la maquinaria sigue activa en la zona del Arraijanal a pleno sol del día. “Estamos en plazos, yo creo que para 2024 sí estará”, aseguran fuentes de la construcción. La cantera tendrá que seguir esperando su fábrica de talento.
