La enfermedad coronaria no obstructiva es una de las causas más importantes de mortalidad. Una realidad que puede cambiar desde Málaga. Un equipo de investigadores ha desarrollado un sistema inteligente de ayuda al diagnóstico clínico de la enfermedad, con el que han recibido el tercer Premio Unicaja de Innovación en Biomedicina y Salud, dotado con 15.000 euros, de la mano del Instituto de Biomedicina de Málaga (Ibima-Plataforma Bionand) y la Fundación Unicaja.
Esta propuesta, basada en la inteligencia artificial, tiene como objetivo mejorar el procedimiento del diagnóstico de esta patología. Este premio supone “un gran impulso y un apoyo” a la investigación malagueña y andaluza, ha agradecido Ana Isabel Molina, una de las investigadoras principales del proyecto y cardióloga de la Unidad Clínica de Cardiología y Cirugía Cardiovascular del Hospital Universitario Virgen de la Victoria.
“La ciencia necesita de entidades como la Fundación Unicaja y el Ibima” para seguir “apostando por el progreso y la innovación”, ha indicado Molina, quien ha dedicado este premio a todos los investigadores e investigadoras “porque su trabajo, esfuerzo y entusiasmo hacen que la ciencia avance”.
El equipo de investigadores implementará el proyecto ganador durante los próximos 18 meses, en los que desarrollará un sistema de IA en el “que los cardiólogos puedan subir las imágenes de las coronarias, son imágenes de rayos X, y el sistema automáticamente pueda detectar la enfermedad coronaria o el tipo de estrechez que puede haber en la arteria, e, incluso, su grado de estrechez”, ha detallado Esteban José Palomo, co-investigador y profesor titular del Departamento de Lenguajes y Ciencias de la Computación de la Universidad de Málaga.
El sistema será capaz de analizar las coronariografías de pacientes mediante un algoritmo para caracterizarlas y poder predecir la presencia de eventos cardiovasculares en el seguimiento. Además, tratará de determinar si existen diferencias entre el pronóstico asociado a subgrupos de pacientes de especial riesgo como diabéticos, pacientes de edad avanzada y, en especial, de mujeres.
Se pretende que la herramienta sirva como un recurso fundamental de apoyo al diagnóstico, ya que posibilitará la identificación y el registro automatizado de los resultados de los procedimientos, con la consecuente reducción de la carga laboral para los profesionales de Hemodinámica y de los tiempos de espera de los pacientes. Asimismo, facilitará la toma de decisiones, especialmente en casos de pacientes complejos, y favorecerá la toma de decisiones en equipo. Todo esto es lo que “pretendemos conseguir”, ha dicho Palomo, con la ilusión de “tener éxito en la tarea”.
El proyecto ganador “aúna” medicina e inteligencia artificial, ha destacado Ana Cabrera, responsable de Solidaridad e Investigación de Fundación Unicaja, y es “un excelente ejemplo, donde tecnología, medicina e innovación suponen la clave en el avance de la salud”. Feliz por entregar un premio que hará posible un “diagnostico más eficiente, que redunde en la reducción de la mortalidad” en pacientes que padecen esta enfermedad.