Tras el primer año de mandato en una Casona del Parque con hasta cinco grupos políticos y un Partido Popular en minoría absoluta, los socialistas siguen “tendiendo la mano” al resto de formaciones para “fraguar una opción de gobierno diferente”. Así lo aseguró este lunes la portavoz María Gámez que, acompañada por los ediles socialistas, reivindicó que el PSOE tiene “un proyecto alternativo para Málaga”. “El PP en Málaga solo está pensando en cómo sobrevivir estos cuatro años. Proyecto de ciudad no hay. Siguen empeñados en los museos y en el modelo turístico que no es suficiente.”, criticó ayer la socialista.
Según Gámez, “el PP tiene que gobernar esta ciudad, pero su minoría le lleva a ocuparse de sí mismo”. Más aún, acusó al alcalde, Francisco de la Torre de estar “debilitado políticamente” y “la mejor muestra es que el PP lo quiso desalojar de la Alcaldía, más que nunca está en un fin de ciclo”, aseguró. En clave municipal, Gámez apuntó a que Málaga debe apostar por ampliar su industria, invirtiendo en segmentos más modernos y sostenibles, y calificó como “gran asignatura pendiente” las políticas sociales impulsadas por el Ayuntamiento.
Entre sus grandes apuestas destacó la lucha contra la violencia de género y otras “luchas” como como la apuesta por el metro y la bicicleta como medios de transporte públicos y alternativos a los contaminantes autobuses, o la firme defensa de un modelo íntegramente público para Limasa “Ha pasado un año en el que el PSOE ha demostrado donde gobierna que hace lo que promete con sensibilidad social y con el empleo como prioridad”, indicó Gámez, precisando que “donde no gobernamos, como en Málaga, hemos conseguido poner en marcha acciones de gobierno y hemos llegado al consenso con otros partidos en favor de la regeneración democrática y la transparencia”.