El Unicaja Baloncesto ganó este miércoles en el estreno de la Eurocopa ante el KK Buducnost Voli Podgorica en el Martín Carpen por 83 a 70. Los cinco elegidos de Luis Casimiro para el debut en Eurocopa fueron Josh Adams, Adam Waczynski, Deon Thompson, Jaime Fernández y Volodymyr Gerun.
Pudieron estrenar el electrónico los locales, pero el lanzamiento de Waczynski rebotó en el hierro. Los visitantes no fallaron en su réplica y Suad Sehovic anotó la primera canasta. Thompson y Gerun llevaron a Unicaja a la zaga, siendo el pívot cajista, con asistencia de Fernández, protagonista de un 'alley oop' que salpicó de tímidos aplausos el parqué tras sumar un 2+1.
El empate brilló en el luminoso tras tres minutos de encuentro. Una buena acción defensiva cajista propició la pérdida del Podgorica para comandar el electrónico por medio de los dos tiros libres de Gerun; aunque la igualdad regresó mediado el cuarto (9-9).
La dinámica del partido entró en un oasis extraño, ralentizado, que favoreció el juego de los visitantes para anotar un parcial de 0-8 y ponerse con claridad por delante. Casimiro detuvo el partido para intentar cambiar el ritmo que salpicaba el parqué y que adormecía a los malagueños.
Justin Cobbs le robó la cartera a Alberto Díaz para ampliar todavía más la diferencia. Thompson contrarrestó en la zona rival, donde Unicaja perdió la bola en ataque con extraños lanzamientos que no tocaban ni el aro. Tuvo que ser el capitán, Carlos Suárez, quien acercara a su equipo en el marcador, cerrando el primer periodo con un 18 a 25.
Un triple del propio Suárez abrió el segundo cuarto; le siguió un intercambio de puntos con otro lanzamiento de tres de Díaz. El esfuerzo para anotar de los locales era mucho mayor que el de los montenegrinos, que seguían encarando la canasta cajista con mayor acierto. Aleksa Avramovic sumó desde la línea de 4,60 y Suárez, con otro triple, puso las tablas a 31. Despertó la afición en el ecuador de este segundo cuarto, y con ella Fernández, realizando dos buenas acciones en ataque y en defensa para poner por delante a Unicaja.
Frank Elegar, de uno en uno, y Adams aumentaron la ventaja ante un equipo que no fallaba desde la línea de 6,75. Con intercambio de puntos y la ventaja local en el marcador se cerró la primera parte (48-42).
La defensa local ahogó el ataque del Buducnost hasta agotar la posesión al inicio de la segunda parte. Una buena asistencia en la zona de Ejim a Gerun fue la primera canasta que subió al luminoso en este tercer cuarto. Desde la defensa construyó Unicaja, liderado en ataque por los instantes más brillantes de Adams, superando la barrera psicológica de los diez puntos.
Barrera que no pudieron mantener al final del tercer periodo (67-59). Las puntos se arañaban en ambos aros, lo que permitió a los malagueños llevar el timón del partido. Waczynski anotó desde la línea de 6,75 y la diferencia creció a favor de los locales cuya defensa ahogó el ataque montenegrino y sumaron el primer triunfo de la temporada por 83-70.