Al ser preguntado en Almería por informaciones según las cuales el PP habría pagado 5.000 euros mensuales a Matas cuando no tenía responsabilidades en el partido, puntualizó que desconoce los detalles del caso, pero “en alguna ocasión” esta formación ha concedido “algún tipo de apoyo” a dirigentes cesados en su cargo y pendientes de incorporarse a otra actividad profesional.
“Y a mí me parece bien”, concluyó Arenas, quien tildó de “cínicas” las críticas de los socialistas por el caso Palma Arena y recordó que el PSOE “es el partido vinculado a la corrupción en los últimos 30 años en España y, hoy por hoy, tiene decenas de imputados en Andalucía”.
En un sentido distinto se pronunció la presidenta del Gobierno regional madrileño y del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, quien subrayó en relación a este caso que, si algunos han realizado cuestiones incorrectas, ilegales o delictivas, “debe perseguírseles con toda la fuerza de la ley”.
La existencia de “algunos corruptos” lo que tiene que hacer es “animarnos a denunciarles para que jamás estas excepciones se puedan convertir en regla general”, indicó Aguirre, quien se declaró “profundamente apenada”, porque “estas cosas perjudican a todos” los que, como ella, están “en el servicio público”, si bien se alegra de que “se aclaren estas cuestiones”.
En el PSOE, el ministro de Fomento y vicesecretario general del partido, José Blanco, afirmó desde el municipio coruñés de Fene que el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, “está tardando demasiado en dar explicaciones” sobre este caso, antes de insistir: “está callando y está otorgando con prácticas irregulares”, comentó.