El Gobierno de Japón ha superado la cuestión de confianza que se ha votado este jueves en la Cámara Baja, a pesar de lo cual, el primer ministro, Yoshihiko Noda, ha pactado con la oposición celebrar elecciones anticipadas tras la aprobación parlamentaria de la ley para subir los impuestos sobre el consumo.
La Cámara Baja ha rechazado la cuestión de confianza con el voto negativo del gobernante Partido Democrático, que controla la sede legislativa, y del Nuevo Partido del Pueblo, aliado del Ejecutivo, según informa la televisión pública NHK.
Antes de que comenzara la votación, dos legisladores del Partido Democrático han entregado sendas cartas de dimisión y han expresado su intención de apoyar la cuestión de confianza, mientras que el ex primer ministro Yukio Hatoyama y otros cinco diputados oficialistas se han ausentado.
La cuestión de confianza fue presentada el pasado martes por seis partidos opositores, entre ellos el formado por el ex secretario general del Partido Democrático Ichiro Ozawa, que el pasado mes de julio abandonó la formación y creó una propia, precisamente, en señal de protesta por la subida de los impuestos sobre el consumo.
Los promotores de la cuestión de confianza argumentan que la subida de los impuestos sobre el consumo contradice el programa electoral con el que el Partido Democrático se presentó a los comicios de 2009, en los que conquistó el poder tras 55 años de gobierno del Partido Liberal.
Además, aseguran que, según las encuestas publicadas por la prensa nipona, la mayoría de los japoneses se opone a la subida impositiva y que, a pesar de ello, el Gobierno insiste en materializar su propuesta, aunque, en su opinión, carece de legitimidad popular.
Tras la votación de este jueves, el primer ministro ha superado un primer obstáculo, pero todavía debe superar otro, ya que siete partidos políticos han presentado una moción de censura en su contra que se votará en la Cámara Alta, dominada por la oposición.
ELECCIONES ANTICIPADAS
En este contexto de inestabilidad política, los principales partidos, el Democrático y el Liberal, han llegado a un acuerdo para disolver la Cámara Baja una vez que se haya aprobado la subida de los impuestos sobre el consumo y convocar elecciones generales anticipadas.
El acuerdo, en el que también participa el partido minoritario Nuevo Komei, incluye el compromiso de los líderes de las tres formaciones de impulsar la aprobación de la subida impositiva en ambas cámaras legislativas.
Todavía no se sabe con exactitud cuándo se producirá la disolución de la Cámara Baja. Los liberales abogan por que se lleve a cabo al término de las sesiones, el próximo 8 de septiembre, mientras que los democráticos pretenden prolongar su actividad hasta el final del año fiscal, en el mes de marzo.
Los democráticos, que en su mayoría se oponen al acuerdo alcanzado con la oposición, han advertido de que no cooperarán con el Gobierno si los liberales no aceptan la fecha propuesta para la disolución de la Cámara Baja.
Por su parte, el secretario general del Partido Democrático, Azuma Koshiishi, ha advertido de que si Noda o su homólogo liberal, Sadakazu Tanigaki, fallan en su intento de ser reelegidos como líderes de sus respectivos partidos políticos en las primarias del próximo mes, el acuerdo quedará invalidado.
