Al parecer, los inmigrantes cargaron con violencia y, en consecuencia, tres guardias civiles resultaron heridos.
El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda (PP), criticó “la agresividad” con la que están actuando los inmigrantes que intentan pasar y solicitó una “mayor colaboración” por parte del gobierno Marroquí.
El cuarto intento de entrada de la semana lo protagonizó un grupo de trece subsaharianos que intentaron “entrar en Melilla por la fuerza” la madrugada del sábado al domingo a través de las compuertas del arroyo Mezquita situadas en la frontera con Marruecos. En la acción resultaron lesionados leves tres guardias civiles que ya han sido dados de alta, aunque uno de ellos precisó puntos de sutura.
Cuatro de los inmigrantes consiguieron superar el cordón de seguridad, siendo detenidos por la Guardia Civil. A los cuatro se les aplicará lo dispuesto para estos casos en la vigente Ley de Extranjería, que establece su expulsión de territorio nacional una vez que se les identifique y se realicen las gestiones con su país de origen para proceder a la repatriación.
Esta situación fue criticada por el presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, tras presidir el acto de imposición de coronas a difuntos melillenses de especial recuerdo.
Imbroda demandó una “mayor colaboración” por parte de Marruecos para frenar las avalanchas que se vienen registrando desde que el domingo pasado se produjeran unas inundaciones que dañaron los sistemas de seguridad de la frontera que separa la ciudad autónoma del reino alauí, entre ellos más de 30 metros de doble valla que se desplomaron.
La primera autoridad melillense mostró su “preocupación” por estos hechos porque los subsaharianos que intentan acceder irregularmente a Melilla “ya no vienen corriendo para saltar un obstáculo o forcejear, sino que llegan armados con palos y piedras”.
El presidente expresó su inquietud porque, tras cuatro intentos, se ha demostrado que “ya no es ocasional” que los inmigrantes intenten entrar y, además, de “forma agresiva”.
Por último, manifestó su solidaridad con las fuerzas de seguridad que realizan la vigilancia en los puestos fronterizos: “Mi solidaridad con ellos y gracias a la Guardia civil, porque está dando siempre el do de pecho”.