El Ejército israelí anunció hoy el hallazgo de un túnel que se adentra varias decenas de metros en el sur de su territorio desde Gaza, el primero después del fin de la ofensiva de 2014 sobre la Franja, que tuvo entre sus principales objetivos la destrucción de estas infraestructuras.
En un comunicado militar se informa de la "neutralización" del subterráneo localizado hace una semana como resultado de una operación conjunta entre los servicios de inteligencia israelíes y el Ejército, que se valieron de un sistema de tecnología avanzada para detectar la construcción.
La salida del túnel se sitúa en territorio israelí, a unas decenas de metros de la valla que rodea el perímetro de Gaza y "cerca de una comunidad civil israelí" en el consejo regional de Eshkol, informó en una conferencia telefónica el portavoz del Ejército, Peter Lerner.
El portavoz aseguró que el túnel excavado a unos 30 o 40 metros de profundidad es de "tipo ofensivo" y fue construido por el movimiento islamista Hamás, que gobierna en Gaza, "para infiltrarse en Israel y cometer ataques terroristas contra gente en las comunidades del sur".
Además, sostuvo que se trata de una construcción nueva, posterior al conflicto de 2014, en contra de informaciones difundidas por un miembro de Hamás desde el anonimato en la web Al Majd de que el túnel "es uno viejo que fue utilizado durante la operación de 2014".
"El objetivo de esta declaración en los medios israelíes es decir que el descubrimiento ha sido un gran logro para conservar el apoyo financiero de EEUU a la lucha israelí contra los túneles. Este proyecto ha fracasado completamente", dijo la fuente de Hamás.
El portavoz israelí declinó comentar sobre el tipo de materiales usados para su construcción al ser preguntado si habían identificado materiales introducidos en la Franja para su reconstrucción.
Lerner expuso que las fuerzas de seguridad israelíes trabajan sobre la hipótesis de que existen más construcciones de este tipo, como subrayó este año el jefe de Hamás en Gaza, Ismail Haniye, cuando afirmó que los milicianos excavan nuevos túneles en preparación para un próximo conflicto con Israel.
Estas infraestructuras, cavadas desde Gaza bajo sus fronteras con Egipto o Israel, han tenido usos tanto comerciales como militares y comenzaron a proliferar cuando Israel impuso el bloqueo que mantiene sobre la Franja desde 2007 (apoyado por Egipto), momento en que el movimiento islamista se hizo con el control de la misma.
La destrucción del entramado de corredores fue una de las razones esgrimidas por Israel para lanzar en 2014 la operación militar "Margen Protector", que en 50 días causó la muerte de más de 2.100 palestinos y 73 israelíes.