La Policía Nacional ha detenido o imputado a más de una treintena de personas por un total de 35 denuncias falsas en Granada capital en el último mes.
De esa manera, cada dos días hay un detenido por simular un hecho delictivo que al final termina detenido o imputado. El objetivo de las denuncias falsas esclarecidas era defraudar a los seguros o justificar gastos. En algunas denuncias se falsearon hurtos realmente ocurridos por asaltos con violencia inexistentes con el objetivo de cobrar las indemnizaciones de las compañías aseguradoras.
Dentro del protocolo establecido por la Jefatura Superior de Policía en Andalucía Oriental, a los detenidos/imputados se les reclaman los gastos de las investigaciones que de media alcanzan de 600 a 1000 euros, informa la Policía en una nota.
Una de las últimas detenidas denunció que había sido asaltada por un individuo que la intimidó con una escopeta de cañones recortados para sustraerle dinero y diferentes efectos, si bien los policías encargados de la investigación determinaron que los hechos no habían ocurrido y que se trataba de una pérdida, por lo que acabó detenida.
Otra persona simuló ser víctima de un tirón de bolso donde portaba, entre otros efectos, un teléfono móvil de alta gama. Tras varias semanas de investigaciones, los policías consiguieron demostrar que la denunciante había vendido el teléfono en una casa de compra-venta de objetos de segunda mano y que su objetivo era defraudar a la compañía aseguradora.
Estas conductas suponen una distracción de las funciones de prevención y persecución del delito que tiene encomendada la Policía Nacional y, debido al incremento de estos ilícitos penales la Jefatura de Policía de Andalucía Oriental ha establecido un protocolo para reclamar los gastos a los simuladores de hechos delictivos, que de media están alcanzando de 600 a 1000 euros.
Agentes de la Comisaría Provincial de Policía Nacional de Granada llevaron a cabo las investigaciones.
