El portavoz de Fomento del Grupo Parlamentario Podemos Andalucía, Juan Antonio Gil, ha exigido este sábado al Gobierno central que "reconsidere su decisión" de eliminar la conexión ferroviaria directa entre Granada y Barcelona que dejará de estar operativa a partir del día 2 de agosto, siendo sustituida por una conexión combinada de autobús y AVE.
A través de un comunicado, Gil ha declarado que el cierre de esta línea, que opera hasta la fecha en horario nocturno y por un "precio asequible", obligará a la ciudadanía a desplazarse hasta Antequera (Málaga) en autobús para tomar allí el AVE a Barcelona, "lo que genera no sólo una desventaja en términos de comodidad para el pasajero, sino que incide perversamente en la conversión de la red ferroviaria en un sistema exclusivo para personas de alto poder adquisitivo, dado el elevado coste de los billetes de alta velocidad".
Asimismo, Gil ha declarado que suprimir la conexión supone "un retroceso en la cohesión territorial y social" del país, pues "se perderá un vehículo vertebrador de Andalucía Oriental con cuatro capitales de provincia --Valencia, Castellón, Albacete y Tarragona--, además de limitar la movilidad de la ciudadanía andaluza respecto a otras ciudades destacadas como Linares-Baeza (Jaén), Alcázar de San Juan (Ciudad Real) y Salou (Tarragona)".
En este sentido, el parlamentario de Podemos ha opinado además que la decisión de eliminar este tren es "un nuevo golpe que debilita las posibilidades de nuestra industria turística, en especial la oferta de interior".
Asimismo, este portavoz de Podemos en Andalucía ha expresado el compromiso de dicha formación con un modelo de movilidad en el que el ferrocarril "juegue un papel troncal para el transporte de viajeros en el interior de la comunidad y en su articulación con resto de la península", atendiendo para ello a factores de inclusión social y cohesión económica y territorial.
"Todo ello desde una óptica de racionalización de la inversión en infraestructuras que ni PP ni PSOE ha sabido implementar mientras nos conducían a un modelo de megaconstrucciones infrautilizadas", ha concluido Gil.
