El PP en el Ayuntamiento de Granada ha reclamado al equipo de gobierno que preside el socialista Francisco Cuenca que "agilice" la instalación de seis cámaras de videovigilancia en el Albaicín, un proyecto "muy peleado" y diseñado por el Consistorio que, a finales de febrero, recibió el visto bueno el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) para ubicarlas.
En una nota, la concejal del PP María Francés ha detallado que los 'populares' ya tienen conocimiento de que el proyecto puede seguir adelante. "El área de Protección Ciudadana estaba haciendo las gestiones pertinentes con Contratación para poder adaptarlas al contrato de videovigilancia dependiente de la Policía Local", ha afirmado.
La concejala ha indicado que "el visto bueno de la Justicia lo recibimos hace cinco meses, ya sabemos que las cámaras se pueden poner, la financiación estaba buscada y lo que hace falta ahora es saber el cuándo", a lo que ha añadido que creen que "el equipo de gobierno debe darse prisa porque es un proyecto con el que se protege una parte emblemática de la ciudad, un barrio que es Patrimonio Mundial de la Unesco".
Tanto María Francés como la portavoz del grupo, Rocío Díaz, han hecho hincapié en que se trata de una iniciativa que se gestó mientras en Granada gobernaba el Partido Popular. "Lo advertimos porque aquí debería haberse producido un traspaso de poderes, pero la soberbia de los socialistas lo ha impedido".
"Ahora han adquirido la costumbre de atribuirse logros que no le corresponden, y ejemplos ya hemos puesto varios. No nos gustaría que cuando finalmente se instalen las cámaras en el Albaicín, el PSOE volviera a sacar pecho y a hacerse las fotos para hacer ver que es su iniciativa. Sería volver a engañar a los granadinos", han resaltado.
La iniciativa ideada por los 'populares', según informa el partido, consiste en colocar seis cámaras que grabarían las puertas de Las Pesas, Monaita y Elvira, el albije del Zenete y el entorno del palacio de Dar Al-Horra. Se trata de unas cámaras con sensores que únicamente graban cuando cambia la textura de un monumento o hay movimientos extraños.
Según han detallado desde el PP, el principal objetivo es combatir actos vandálicos, pintadas y grafitis "y demostrar el compromiso de los populares con el patrimonio del barrio del Albaicín y de la ciudad", ha apostillado María Francés.
