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Provincia de Granada

Granada supedita el proyecto de videovigilancia a la fijación de multa

El proyecto requiere de una "norma y de una ordenanza que regule de forma muy clara cuál es la persecución que desde el Ayuntamientos se va a hacer"

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El alcalde de Granada, Francisco Cuenca, ha condicionado este martes la instalación de cámaras de videovigilancia en el barrio del Albaicín, que se proyectó con el objetivo de evitar vandalismo y pintadas en el patrimonio histórico y que cuenta con el visto bueno del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), a la aprobación de una ordenanza reguladora que fije las sanciones a imponer.

En declaraciones a los periodistas durante una visita a una zona de huertos urbanos en La Chana, Cuenca ha indicado que el gobierno municipal está actualmente analizando la implantación de la videovigilancia que, según ha dicho, "requiere presupuestos y un estudio serio". Además, ha indicado que esa planificación no sólo debe limitarse a la instalación de cámaras, sino que además "exista una cobertura de una normativa que deje muy claro cuáles son las soluciones para aquellos vándalos que ensucien nuestro patrimonio".

En su opinión, el proyecto requiere de una "norma y de una ordenanza que regule de forma muy clara cuál es la persecución que desde el Ayuntamientos se va a hacer para este tipo de actuaciones que afectan al patrimonio". "No vamos a colocarlas nada más, lo vamos a hacer a través de una ordenanza que fije cuáles son los castigos que vamos a implantar de la manera más contundente posible", ha explicado el alcalde, quien ha indicado que en los próximos meses el gobierno local tener ya cerrado el proyecto total, que incluya presupuestos y planificación.


El proyecto, que fue presentado por el anterior gobierno local, del PP, y del que ya informó favorablemente la Comisión de Garantías de la Videovigilancia del TSJA, tiene previsto la instalación de seis videocámaras en cinco ámbitos del Albaicín para defender edificaciones monumentales y de equipamiento.

Las seis cámaras se instalarán en zonas como la Puerta de las Pesas, el entorno del Palacio de Dar Al-Horra, el aljibe del Zenete, la Puerta de Elvira y Puerta Monaita. En todos los casos, las videocámaras no visionan zonas residenciales y sólo grabarían en paredes.

En la Puerta de las Pesas, el proyecto contempla la instalación de una cámara en el interior del pasadizo que permita controlar sus paredes. En la Puerta Monaita, la videocámara se instalará en la zona exterior alta en vertical con el pie de las escaleras con el fin de controlar las paredes.

En el caso del entorno del Palacio de Dar Al-Horra, se instalarán dos cámaras para visionar el callejón del Gallo y el callejón de las Monjas. En la Puerta de Elvira, se ubicará una cámara en la entrada del arco, en la fachada de la edificación residencial adjunta, visionando sólo el arco, su fachada y el interior del mismo. Por último, en el aljibe del Zenete, se ha proyectado la colocación de una cámara en la pared de subida de la escalinata.

Para el tratamiento de las imágenes, se utilizará un sistema inteligente de gestión de imágenes, que tienen la ventaja de que pueden programarse para que detecten y graben sólo las circunstancias que revelen situaciones continuadas de tiempo en el mismo lugar.

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