Las Asociaciones de Empresarios del Altiplano y de la Comarca de Huéscar, y de Agricultores, Ganaderos y Productores, en el norte de la provincia de Granada, han solicitado que se suministren equipos de protección individual (EPI) para que los trabajadores del sector primario desarrollen su labor con garantías sanitarias frente al coronavirus.
En una nota de prensa conjunta, las tres asociaciones han pedido que, una vez que los sanitarios estén aprovisionados con los EPI que demandan para "atender con garantías a los afectados" por Covid-19, "se dicten las normas y medidas sanitarias necesarias para garantizar la seguridad en la producción de alimentos en el Altiplano de Granada".
Solicitan, en este sentido, que "se garantice" el suministro de EPI para el sector primario a la Oficina Comarcal Agraria, los Ayuntamientos o las tiendas de suministros agrícolas para su posterior distribución a los agricultores. El objetivo es que "puedan seguir realizándose las tareas agrícolas con las garantías mínimas de seguridad sanitaria para los trabajadores" del campo.
A su vez, piden que se disponga de servicios mínimos en los talleres de maquinaria agrícola, de repuestos y de suministros agrícolas, con el fin de que "puedan atenderse averías" de estas máquinas y disponer de "material fungible necesario para el mantenimiento de los tractores".
Exponen que las medidas del Real Decreto por el que el Gobierno activó el estado de alarma destinadas a garantizar el abastecimiento alimentario no "se están ejerciendo" en el Altiplano de Granada, ya que no se disponen de estos EPI, como son básicamente "gafas, mascarillas y trajes de protección".
Tanto las empresas agrícolas como los autónomos del campo no disponen en el mercado de estos EPI para desarrollar las tareas agrícolas y los tratamientos fitosanitarios, poniendo "en riesgo la seguridad de los trabajadores y empresarios".
Esto está creando una gran incertidumbre en las empresas agrarias y agroalimentarias, lo que está provocando el "retraso" de las distintas campañas agrícolas, incluso "la parada de las actividades", lo que mantienen que "puede suponer en un futuro cercano un grave desabastecimiento agroalimentario hacia la población".
La necesidad de EPI se está produciendo sobre todo en el sector hortofrutícola, con más de 1.000 hectáreas en el Altiplano de Granada, ya que es en este momento cuando se están realizando gran parte de las tareas agrícolas y cuando se demanda a un mayor número de trabajadores.
En este sentido, la Asociación de Agricultores, Ganaderos y Productores ha estimado una necesidad inicial de hasta 10.000 EPI para "garantizar la seguridad de los trabajadores del sector primario en el Altiplano".