¿Cuáles son los vestigios del fútbol, el deporte español por excelencia? Aunque se trata de un deporte relativamente joven, su ADN ha estado presente a lo largo de la historia universal antes de su creación oficial en 1863. ¿Cuáles fueron sus antecedentes? ¿Qué deportes se practicaban en la historia antigua poniendo al balón en el centro de todo?
El Japón remoto
La referencia más remota se encuentra en los anales de la historia de Japón. Datados en más de mil años antes de Cristo, los vestigios del fútbol podrían situar a la mujer en el centro de este deporte. Específicamente en aquellas que ocupaban la cúspide de los clanes y tribus que habitaban las islas japonesas. Uno de sus pasatiempos más populares era la práctica de un juego que consistía en la disputa de una pelota de grandes dimensiones. A pesar de que no contaba con las reglas que hoy conforman al deporte de balón pie, sí que contaba con unos rasgos básicos que guardan cierta relación con él. En realidad, no existe certeza de que la primera referencia histórica del fútbol se circunscriba a esta particular práctica, pero sí que constituye una de las referencias históricas análogas más remotas.
El Tsú-Chú chino
No obstante, para contar con una referencia más específica, habría que avanzar un poco más en la historia y desplazarnos a otro país del continente asiático. Quizá el antecedente más antiguo que guarda una analogía más clara sea el Tsú-Chú. En este juego, dos equipos también rivalizaban por el dominio del balón aunque en este caso, había un objetivo: Introducirlo en un orificio situado en el centro del terreno de juego. En el Tsú-Chú, únicamente existía una portería que estaba construida a partir de unos marcos de seda de grandes dimensiones y que se elevaba a unos diez metros de altura.
Antigua Grecia, Homero y el juego del balón
Sin embargo, el balón continuó siendo un símbolo del ocio a medida que avanzaba la historia. En la época de la Antigua Grecia su utilización quedó relatada incluso en la Odisea de Homero. En esta obra maestra de la literatura universal, el autor describió cómo Ulises despertó una mañana al escuchar a la joven Nausica jugando con sus amigas al deporte del balón (a un deporte llamado Episkyros). Además, hoy existen referencias visuales en forma de ilustración sobre diversos papiros y esculturas que dejan constancia de que los habitantes de la antigua Grecia ya jugaban al balón en el siglo VIII Antes de Cristo. Concretamente, en la primera celebración oficial de las olimpiadas griegas.
El Haspartum de la Roma Imperial
Dentro de las civilizaciones más longevas de la historia, el balón también dejó su rastro en la Roma Imperial. Sobre todo dentro del contexto militar, la pelota adquirió una connotación especial. El Haspartum consistía en golpear una pelota de reducidas dimensiones con la mano y utilizando una especie de guante hecho a base de metal. Su práctica se hacía de forma grupal y se practicaba a través de competiciones. Uno de sus aficionados más acérrimos fue el propio Julio César.
La antigua Edad Media: Violencia y muerte en el juego del balón
Durante la antigua Edad Media se sentaron las primeras bases históricas del fútbol en una práctica que sobre todo era popular entre las clases más bajas. Hemos de tener en cuenta que la nobleza hallaba en la caza sus momentos de ocio generalmente.
La práctica provenía de un juego celta llamado Cnapan. Uno de los rasgos más significativos era la ausencia de reglas claras. Éstas variaban dependiendo del pueblo en que se practicase. Por lo general, no estaba permitido que el jugador que portase la pelota recibiese ataques grupales. Únicamente podía ser atacado por un único jugador y nunca por encima de la cintura. Sin embargo, la figura del árbitro (o algo similar), no existía por lo que las reglas que se estableciesen solían infringirse continuamente. Su práctica solía estar asociada a violencia física y los partidos solían derivar en heridos o incluso muertos.
Los antepasados de un deporte contemporáneo
Todas estas referencias milenarias dan cuenta del largo recorrido que existe detrás de uno de los juegos más populares de nuestra era. Especialmente, de la pelota como uno de los elementos culturales deportivos más antiguos.
Pero al fin y a cabo no se trata más que de los primeros bocetos de un deporte que no vería la luz hasta finales de la edad moderna. No sería hasta 1863 que aparecería lo que hoy conocemos como fútbol.
Su formalización se produjo a través de la Football Association (FA), la asociación inglesa que se encargó de sentar sus bases. Desde entonces se ha convertido en uno de los deportes masivos más importantes de la era contemporánea. Hoy los pronósticos de fútbol mueven enormes sumas de dinero en un contexto en el que el propio deporte ha trascendido la cultura para conquistar una industria compuesta por millones de seguidores alrededor de todo el planeta.
