La
Junta de Andalucía ha asegurado que la administración cuenta, desde el año 2017, con un
Programa Integral de Silicosis de Andalucía (PISA), y que las “acciones de mejora implantadas se siguen manteniendo tras su aplicación” centradas en la formación, prevención y la sanción ante los incumplimientos.
El plan, según la Junta, aúna los esfuerzos tanto de la
Consejería de Salud y Consumo como de la de
Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, y se puso en marcha tras detectarse “un
importante aumento de la incidencia de
casos comunicados y diagnosticados de
silicosis” a partir de 2007.
Esta situación “
epidemiológica” obligó a ambas consejerías a desarrollar “acciones para
prever y controlar este riesgo laboral, dirigidas a todos los agentes implicados: empresarios, trabajadores, Mutuas Colaboradoras con la Seguridad Social y Servicios de Prevención de Riesgos Laborales”. La actuación quedó definida en
2017 en el
Programa Integral de Silicosis de Andalucía (
PISA).
Por parte de la Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, tanto la Estrategia Andaluza de Seguridad y Salud Laboral, como el
III Plan de Actuación que desarrolla esta estrategia en este año contemplan medidas específicas en el ámbito de la prevención a la silicosis, según han apuntado fuentes de este departamento.
Así, desde la Consejería, se actúa “en un
doble sentido”, por un lado procurando
formación y apoyo a las empresas para que cumplan la
normativa para salvaguardar la salud de los trabajadores y que el
centro de trabajo sea un lugar idóneo, y, por otra parte,
imponiendo las sanciones cuando se haya producido un incumplimiento en las normas reguladoras.
En cuanto a las
inspecciones realizadas, los técnicos de la Junta habilitados para realizar tareas de Inspección han
visitado en 2022 un total de
70 centros de trabajo,
23 de los cuales se les realizaron
requerimientos de subsanación de deficiencias, y se han propuesto
actas de infracción a la Inspección de Trabajo del Ministerio en
tres casos. En 2023 se continuará con este plan de visitas, según fuentes de la Consejería de Empleo.
Por otra parte, en marzo del pasado año, la Junta, la Universidad de Córdoba y la propia empresa
Cosentino, cuyo presidente ha sido condenado a seis meses de prisión por delitos de lesiones por silicosis, impulsaron el
Centro Andaluz de Enfermedades Respiratorias de Origen Laboral.
El nuevo instituto universitario de investigación se centra en la
silicosis, enfermedad laboral relacionada con el sector de actividad de
corte, tallado y acabado de piedra, aunque recibió críticas por parte de los sindicatos, al considerar que “la
empresa que registra el
mayor número de casos de silicosis reconocidos como enfermedad profesional en Andalucía sea la más adecuada para actuar como
referente en materia de seguridad y salud laboral”, según UGT.