El presidente de la Asociación de Hosteleros de Sevilla y Provincia, Alfonso Maceda, ha confirmado que presentarán alegaciones al régimen sancionador que incluye el borrador de la ordenanza de veladores al considerarlo “desmesurado”, ya que se elevan las sanciones hasta los 120.000 euros como un delito urbanístico que consideran “no es aplicable”.
Maceda, durante una entrevista en el programa Las Siete de 7TV, ha confirmado que presentarán alegaciones a la ordenanza porque “quedan puntitos por resolver”, entre ellos, el régimen sancionador. El presidente de la AHS entiende que se deba subir las sanciones, porque “no podemos defender” al que coloca más veladores, pero sí ve “desmesurado” que se eleven hasta los 120.000 euros y se establezcan como delito urbanístico, régimen que no ve “aplicable” porque cuando se redactó esa ley “no se estaba pensando en los veladores”.
“Me hiere pero no me mate”, ha ejemplificado, puntualizando que es cierto que en los trámites de veladores, hay empresarios que se arriesgan a ponerlos sin licencia porque tardan “un año y medio” y tiene “que pagar el alquiler y alimentar su casa”, por lo que entiende que se “arriesga” y si le llega esa sanción, “realmente lo deja en la calle”.
Maceda ha asegurado que quisieron “ir de la mano” con los vecinos sin que haya sido posible y que se han reunido con ellos junto con el Ayuntamiento, aunque “hemos visto poca representatividad en esos colectivos” e incluso “intereses personales en algunas demandas”, apuntando que “no nos ha parecido serio” la queja por la ampliación de horario cuando “realmente viene de la Junta de Andalucía”, que es la que fija las dos de la mañana.
“La realidad ha cambiado mucho”, decía Maceda, apuntando que la conciliación también afecta a sus trabajadores y a los propios empresarios “que están detrás de la barra catorce horas para levantar los negocios”. “Realmente se ha minimizado muchísimo las molestias de ruido por los veladores, a las doce de la noche, difícilmente cenas en Sevilla”, explicaba el presidente de los hosteleros, reconociendo que ha una corriente “antivelador aunque luego la gente busca el velador”.
En cuanto a las tarimas Covid, otro de los aspectos polémicos “que en principio los vecinos estaban de acuerdo y ahora no”, ha considerado que son un elemento “que deja mucho más despejada la senda peatonal, que se cierra y no se pueden poner veladores fuera de ese recinto”. “Es positivo”, ha sentenciado, apuntando que en la ciudad habrá 54 plataformas y supone apenas quitar un centenar de aparcamientos “en una Sevilla de 700.000 habitantes”, por lo que no lo considera un “problema grave”.
Sí que ha puntualizado que lo que “ya no existe y no existirá” es lo que ocurrió en pandemia, que se extendieron las zonas de veladores para que no estuvieran “tan juntitos”, algo que “ni viene en la ordenanza nueva”.
También ha reconocido como “tema polémico” entre los propios hosteleros el que determinados establecimientos singulares pudieran sacar los “tanques a la calle”, ya que lo consideraban un “trato desigual” aunque ha reconocido que “difícilmente” lo vaya a solicitar ninguno porque “les prohíbe muchísimas cosas”, entre ellos la zona delimitada y el aforo. “Al final, si tienes que pagar un guarda que esté pendiente de eso, difícilmente se podrán acoger”, reflexionaba.
Sobre la nueva ordenanza de limpieza que les obliga incluso a limpiar las manchas de grasa o residuos de sus terrazas, ha apuntado que todo hostelero limpia la suya y que algunos de esos residuos “requieren una maquinaria que todos los bares no tienen”, aunque ha señalado que esperan poder llevarlo a cabo “de una manera normal, aunque no es fácil”, reconocía.
En cuanto a la creciente turismofobia, ha reconocido que “nos da miedo que se convierta en una moda”, recordando que al final “todos somos turistas cuando salimos”. “Entiendo que habrá que tomar medidas para que no se nos desborde pero condenar al turismo es como matarnos, pegarnos un tiro en el pie”
Ha defendido que un establecimiento frente a la Avenida de la Constitución, con el encarecimiento de los alquileres en el Casco Histórico, tenga que poner unos precios más elevados, “por ubicación simplemente”. “Es verdad que los sevillanos salimos mucho y no podemos pagar precios exagerados, pero a lo mejor no hay que venir tanto al Centro y quedarnos en nuestro barrio, que realmente los precios siguen siendo bastante asequibles”, ha reflexionado.
