Los rocieros de Triana y Macarena han emprendido hoy su camino hacia la aldea almonteña cargados de ilusión, alegría y devoción en una jornada marcada por el calor y el color, acompañados por los sones rocieros de flauta y tamboril y el estruendo de los cohetes que preceden a cada comitiva.
Tras madrugar para celebrar sus respectivas misas de romeros, las dos hermandades sevillanas han puesto sus carretas -tiradas por bueyes-, carriolas y caballos en las calles de la ciudad de Sevilla a primera hora de la mañana.
Una puesta en escena en la que ha destacado como cada año el colorido de las batas rocieras de las peregrinas, entre los que ha reinado el color verde agua con lunares o el rojo pasión propio de las rosas sobre fondo negro.
La devoción por la Blanca Paloma ha recorrido la calle trianera de Castilla a través de los sones de los tamborileros rocieros, quienes han pasado entre el gentío con sevillanas como 'Cuando pasa Triana', 'Marisma mía', 'Todo se alegra' o 'Chumberas del camino'.
En los próximos ocho días estas hermandades vivieran su particular peregrinación a la aldea almonteña, cuyo itinerario comprende cuatro días de camino hasta que la de agrupación de la Macarena sea presentada el viernes por la tarde a la Virgen del Rocío y la hermandad de Triana haga lo propio el sábado por la mañana.
Tan solo día y medio después, en la madrugada del Domingo al Lunes de Pentecostés, llegará el momento álgido de esta fiesta religiosa, cuando, una vez que entre el último Simpecado después del Santo Rosario que se reza, el 'salto de la reja' dé paso a la salida de la Virgen del Rocío de su santuario y horas después comience el regreso de las hermandades a sus lugares de origen.
Este año, la Hermandad del Rocío de Triana cuenta con 4.000 peregrinos que componen el cortejo -de los 5.000 hermanos que tiene en nómina-, 300 caballistas, 32 carretas, 150 carriolas, 120 coches de caballo, 250 vehículos y 15 camiones.
Esta mañana, para celebrar el 750 aniversario de la parroquia de de Santa Ana, esta hermandad ha realizado su salida procesional desde esta iglesia tras la misa de romeros, algo "especial", según han dicho a Efe Carmen y Mercedes, dos hermanas de esta cofradía que superan la treintena de años peregrinando.
Carmen ha manifestado que el camino "tiene muchos momentos de sufrimiento" en los que es necesario apoyarse en la Virgen, "tener fe, convivir, ser solidario con las otras personas que hacen el camino y hacer hermandad", ya que "si la Virgen no es la meta, no tiene sentido que se peregrine".
Mercedes ha revelado ha hecho promesa en su camino para conseguir "salud" para ella y su familia, "a los amigos que se han quedado en el camino y a los más necesitados".
Por su parte, la Hermandad del Rocío de Macarena cuenta en este año con 600 peregrinos -de los 1.300 hermanos que registra-, 50 caballistas, 1 carreta, 32 carriolas, 12 coches de caballo y 60 vehículos.
Las dos hermandades, así como el resto de las corporaciones, irán acompañadas de un dispositivo de seguridad compuesto por más de una decenas de agentes del Cuerpo Nacional de Policía, agentes locales de las diversas localidades por las que transiten y servicios de emergencia encuadrados dentro del Plan operativo de emergencia Romero.