Sevilla aprueba su Plan de Accesibilidad Universal con el compromiso de que en el presupuesto de 2021 haya ya partidas presupuestarias con las que empezar a eliminar barreras arquitectónicas que hacen inviable la movilidad a cientos de miles de vecinos.
El Pleno del Ayuntamiento de Sevilla ha dado el visto bueno al diagnóstico realizado a 1.168 calles y 284 edificios municipales y que fue presentado el pasado mes de noviembre en el Hogar Virgen de los Reyes tres años después de que se licitara el plan municipal.
El delegado de Hábitat Urbano, Antonio Muñoz, ha recalcado que el documento es un “punto de partida” y una “fotografía sobre los déficit” que el Gobierno municipal asegura que empezarán a ser subsanados a partir del próximo año, fijándose “prioridades” de actuaciones en la Comisión de accesibilidad.
El portavoz de Adelante Sevilla, Daniel González Rojas, ha dado su voto afirmativo aunque ha advertido de la necesidad de hacer un esfuerzo presupuestario que vaya más allá de los primeros 300.000 euros anunciados para obras para mejorar la movilidad en las calles y edificios municipales. Con esa cuantía harían falta, según sus cálculos, “906 años para garantizar una ciudad accesible”.
El Plan ha contado con el apoyo de Adelante, Cs y PSOE y la abstención de Vox y PP.
El Plan de Accesibilidad Universal de Sevilla, analiza 339 kilómetros de calle y el resultado es que éstos tienen una accesibilidad media global del 43%, un índice que el Gobierno municipal entiende que es “similar al de otras ciudades”. Siete de cada diez calles de la ciudad (75,8%) presentan una accesibilidad menor al 50%. Tan sólo un 24,2% de esas calles tienen un porcentaje de accesibilidad de entre el 50 y el 75%.
En el caso de los edificios municipales, el valor medio global de accesibilidad apenas supera el 25%. Casi la mitad de los edificios estudiados están en labanda del 20 al 40% de valoración e incluso un 37% lo están por debajo del 20% de accesibilidad media. En su conjunto, ningún edificio supera una valoración del 65%.
