Las fuerzas de izquierda de la capital malagueña reclamaron ayer atención para el CEIP Manuel Altolaguirre de Palma-Palmilla, ya que, como se recordó ayer desde el grupo municipal socialista tiene “graves problemas de cimentación en sus edificios y grietas en los muros que han obligado a la reubicación de 60 alumnos de Primaria”. Así las cosas, desde las filas del PSOE y de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Málaga se presentaron mociones al pleno con las que piden actuaciones “urgentes” en el centro escolar.
El portavoz socialista, Daniel Pérez, en compañía de medio centenar de padres y madres de alumnos, ayer a las puertas del centro escolar, reclamó al Ayuntamiento y a la Junta “que se pongan a trabajar de manera inmediata” para realizar actuaciones de mejora estructural y de mantenimiento.
El PSOE pedirá al pleno del Ayuntamiento el “apoyo unánime” a la labor de los docentes del centro, cuya dirección ha rechazado que el edificio “se eche abajo”. Pérez ha recordado que la reparación estructural del Ceip Manuel Altolaguirre “no es algo nuevo”, porque “llevan varios cursos advirtiendo sobre el mal estado de sus paredes y del suelo”.
Mientras tanto, el portavoz de Unidas Podemos y concejal de Podemos, Nicolás Sguiglia, insistió en una “solución inmediata” para los niños del colegio y “una plan de inversiones para la mejora de los centros educativos públicos de la ciudad”.
Además del edificio de Primaria, “los patios se encuentran en un estado lamentable, ya que tienen el suelo rajado y hundido en algunas partes, además de carecer de sombra y sus zonas verdes están totalmente abandonadas, con la existencia de nidos de ratas”, explicó Pérez, que señaló que “la valla perimetral del colegio se encuentra apuntalada en algunas zonas, oxidada y con agujeros y grietas”, mientras que la barandilla de la rampa de acceso desde el patio al edificio, que fue colocada recientemente está suelta en muchos de sus puntos, por lo que genera inseguridad, con “muros están quebrados y faltos de pintura”.
Padres congregados en la reunión con los ediles del PSOE agregaron que la zona de gimnasio es “totalmente impracticable, con humedades, celosías rotas, puerta de acceso descolgada, entre otros desperfectos”.
Por su parte, Esperanza Campos, madre de un alumno, invitó “al señor alcalde y al presidente de la Junta a que vengan al centro, que no lo conocen. Somos muchas madres las que tenemos niños en Educación Especial y no podemos perder este colegio, porque reciben un muy buen trato por los profesores”.
Además, Lorenzo García, que es presidente del AMPA señaló: “No queremos que se cierre este colegio. Queremos que se hagan arreglos para que los niños puedan estudiar con dignidad, que hagan deporte en las pistas, pero con seguridad porque hay muchos socavones y grietas” y manifestó que el traslado de 60 alumnos de Infantil a la planta baja del edificio de Primaria “es evidente”, porque “hay que arreglarlo. Pero de ninguna manera vamos a permitir que se cierre el colegio”.
Por otro lado, la candidata de or Andalucía, remedios Ramos, aseguró que “no son tolerables los dimes y diretes entre el Ayuntamiento de Málaga y la Junta, las dos instituciones gobernadas por el PP, no tendrían que tener estas desavenencias y disputas públicas bochornosas y apostar por la educación pública en Palma-Palmilla”.
Mientras tanto, según indicaron fuentes de la Junta de Andalucía, los técnicos de Agencia Pública Andaluza de Educación, APAE, han estado esta misma semana en el centro con cuyo director se está en contacto, así como con el Ayuntamiento “para buscar soluciones”, teniendo en cuenta que el mantenimiento y conservación son competencia municipal; del mismo modo, se niega que el colegio esté “abandonado”, ya que señalaron que “se actuó” ya que de hecho, “el consistorio, no hace mucho, arreglaba un muro”. Desde educación señalan que “faltan por adaptar los baños y algunos problemas de accesibilidad”, pero que para otras reclamaciones, se debe esperar a los informes de los técnicos de la APAE.