El 55% de los no fumadores están expuestos al humo ambiental del tabaco convencional, según un estudio de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) que analiza el tabaquismo pasivo en cuatro escenarios: hogar, ocio, centros educativos y trabajo.
En declaraciones a EFE el director del Proyecto Integrado de Investigación del Tabaquismo de SEPAR y responsable del estudio, Juan Antonio Riesco, ha explicado que esa prevalencia global baja al 24 % si se excluyen las terrazas de la hostelería, que son el escenario con mayor exposición al humo ambiental, por lo que desde esta sociedad llaman a implementar más restricciones en la nueva ley, "tal y como demanda la sociedad española".
El estudio, realizado el pasado mes de mayo sobre una muestra de 3.000 entrevistas a mayores de 16 años, también concluye que el tabaquismo pasivo en el caso de los nuevos productos (cigarrillo electrónico y tabaco calentado) afecta al 38 % de los no fumadores y al 18 % si no se tiene en cuenta fumar o vapear en las terrazas de los establecimientos hosteleros.
A juicio de Riesco, el estudio demuestra que ha habido un repunte de la prevalencia del tabaquismo pasivo en España en 2024 en relación al último estudio de la Separ (2011), un aumento del 21 % si se consideran las terrazas, y del 3 % si no se tienen en cuenta.
Según ha explicado, en este estudio se introduce el elemento terraza por todo lo que se ha generado últimamente por la prohibición de fumar en estos espacios. "Hemos querido saber qué ocurre y hemos ratificado que en las terrazas se fuma mucho y hay mucha exposición", ha precisado.
En el 34% de los hogares hay un fumador
Según el estudio, el 34 % de los hogares españoles cuenta al menos con un fumador de tabaco convencional y en el 12 % hay, como mínimo, un consumidor de nuevos productos de tabaco.
A la pregunta de si los españoles no fumadores están expuestos al humo de tabaco en su propia casa, el porcentaje llega al 9 % mientras que la exposición a los cigarrillos electrónicos y vapeadores, entre otros nuevos productos, es del 7 %.
Respecto al último estudio, el aumento de exposición de no fumadores al humo en el hogar es ligero: un punto, del 8 % en 2011 al 9 % en la actualidad. Sobre los nuevos productos no hay estimaciones al ser de consumo reciente.
En los centros de estudio es superior la exposición a nuevos productos que a tabaco convencional.
De hecho, el 12 % de los estudiantes no fumadores está expuesto al humo ambiental de cigarrillos electrónicos y tabaco calentado mientras que el humo del cigarro convencional es aspirado, en el entorno de centros educativos, por el 7 % de aquellos que no fuman.
El empleado de hostelería triplica la exposición al humo
El estudio también analiza la exposición al humo en el trabajo que es del 8 % en tabaco convencional y del 4 % en nuevos productos.
No obstante, cuando se analiza el tipo de empresa la situación cambia y en hostelería es del 22 %, es decir prácticamente triplica la exposición frente al resto de sectores laborales.
Según Riesco, "son las terrazas de los locales de hostelería donde los trabajadores del sector se ven diariamente expuestos".
El estudio también analiza la percepción frente al humo del tabaco y los nuevos productos. El 76 % de los encuestados considera que fumar perjudica la salud "bastante o mucho".
Respirar vapor o aerosoles de los nuevos productos parece "menos perjudicial" por lo que la permisividad es mayor. Los consumidores de nuevos productos "molestan menos" que los fumadores clásicos.
La mayoría de los entrevistados, no obstante, se decanta a favor de aumentar las restricciones tanto para el tabaco convencional como para los nuevos productos.
El 17 % de los entrevistados se declara fumador de cigarrillos, y la franja de edad más relevante es de 25 a 34 años, descendiendo gradualmente según la población se hace mayor.
El 10 % de los entrevistados se reconoce como consumidor de nuevos productos, entendiendo por consumidores aquellos que han recurrido a ellos en el último mes.
Los nuevos productos de tabaco son más frecuentes entre los jóvenes de 16 a 24 años, y prácticamente nulos entre los mayores de 54.