A finales de los 70, la Hermandad de los Javieres se vio empujada a abandonar su sede canónica, por entonces la Iglesia del Sagrado Corazón para recalar en Omnium Sanctorum.
El asesor artístico de la hermandad, Manuel Jesús Roldán explica los detalles de ese abandono, haciendo hincapié en que la cofradía permaneció allí "hasta el año 1977 y se marchó por circunstancias complejas dentro de la Hermandad tras 30 años en la Iglesia del Sagrado Corazón"
Roldán explica que desde los regidores del templo, "se invitó a la hermandad a que debía abandonar aquellas dependencias con ciertas excusas sobre si aquello iba a ser cedido, sobre si las dependencias de alrededor no iban a estar en la Compañía...", añadiendo el historiador y profesor que en esta cuestión "cabe recordar que era una época postconciliar y la Compañía de Jesús respiraba otra idea que no es la actual, que no es otra que una cercanía hacia la hermandad es dignísima de agradecer".
"La apuesta de la Compañia y el acogimiento de la propuesta que se le ha hecho para que la hermandad de los Javieres habitemos ese espacio es espectacular", comenta de manera agradecida Roldán.
Conoce más de la cesión de la Iglesia del Sagrado Corazón a la Hermandad de los Javieres en el último programa de La Pasión.
