Una mujer de 37 años falleció a primeras horas de ayer en el Hospital Comarcal del Bidasoa en Irún (Guipúzcoa) después de que, al parecer, una ex pareja suya le asestara una puñalada en el cuello y agrediera también a un varón que intentaba auxiliarla. 

Según informó el departamento vasco de Interior, sobre las cuatro y media de la pasada madrugada, la Ertzaintza fue informada de un posible accidente de tráfico en la carretera GI-2134 en las inmediaciones del citado centro hospitalario. 

Cuando se personaron en el lugar los agentes de la Policía Local de Irún se encontraron con que allí había una mujer que presentaba lesiones por arma blanca en el cuello y otro varón también agredido en la zona del estómago. 

Ante esta situación, los efectivos policiales proocedieron a la detención de un hombre de 37 años, presunto autor de los hechos que se encontraba en el lugar, y se trasladó a los heridos al cercano centro médico. 

Fuentes del Hospital Comarcal confirmó hacia las cinco y media de la madrugada el fallecimiento de la víctima, mientras que el otro varón herido quedó ingresado debido a la gravedad de sus lesiones. 

La Ertzaintza procedió al traslado del detenido a sus dependencias, iniciando la correspondiente investigación. 

Según los primeros datos, el arrestado habría provocado una colisión contra el vehículo en el que viajaba la víctima con la que, al parecer, había mantenido una relación sentimental. Seguidamente, agredió a la mujer con un arma blanca y poco después el implicado causó lesiones con la misma arma a un motorista, de 49 años, que trató de auxiliar a la víctima y que recibió dos puñaladas. 

Las mismas fuentes precisaron que tanto la víctima como el presunto agresor, cuyas identidades no han sido facilitadas, residían en la localidad fronteriza de Irún. 

Por su parte, el pleno del Ayuntamiento de Irún (Guipúzcoa) se reunió ayer de urgencia, después del asesinato la pasada madrugada de una mujer colombiana de 37 años a manos al parecer de su ex pareja, para mostrar su “más absoluta condena” y anunciar que se personará como acusación popular en la causa judicial por esta muerte. 

Todos los grupos del consistorio –PSE, PP, PNV, EB y la izquierda abertzale– han consensuado un texto de condena que fue leído por el primer teniente de alcalde, Miguel Ángel Páez, en el que se manifiesta “la solidaridad con la familia y allegados Yasmin Zamira Rodríguez”, a quienes hacen llegar su “más firme y sincero apoyo”.