El alcalde de Arcos, José Luis Núñez, en su calidad de presidente del Partido Popular (PP) no ha querido poner “paños calientes” a la derrota electoral del pasado 24 de mayo. De hecho, en el inicio de su valoración dijo abierta y claramente que “hemos perdido las elecciones”. No obstante, lamentó que por poco más de 200 votos su partido no obtuviera un concejal más. De haber resultado así muy posiblemente el PP habría seguido gobernando Arcos junto a Ai-Pro; es decir, que se habría reeditado el pacto de hace cuatro años.
En el terreno personal, señaló marcharse “con el trabajo hecho y las manos limpias”, aunque en un momento dado declaró que los arcenses han valorado más otros aspectos de la vida pública que el trabajo realizado desde el Ayuntamiento. Asimismo, y comparando el resultado de Arcos con el conseguido por el PP en otros puntos de España, dijo que lo ocurrido en la ciudad ha sido un reflejo del descontento creado con la crisis y la bajada en sí del número de votos que han sufrido.
Pero mirando hacia el futuro, el todavía alcalde de Arcos manifestó que hará una oposición “seria y responsable”, para lo cual ya tiende la mano al PSOE para seguir trabajando sobre todo en las políticas que favorezcan la creación de empleo y en aquellos proyectos que sean positivos para el futuro de Arcos y de los arcenses. Sin embargo, también anunció una postura fiscalizadora para velar por que el equipo de Gobierno cumpla con sus promesas electorales.
Por último, lamentó en cierto modo que el nuevo equipo de Gobierno inaugure algunos de los principales proyectos en los que el equipo PP-Ai-Pro ha venido trabajando en los últimos años, en alusión al remodelado camping Lago de Arcos, la convertida en centro cultural Casa de los Paletos, el centro de negocios que actualmente construye Zona Franca en el polígono industrial El Peral y, muy posiblemente, la piscina cubierta climatizada, cuya terminación es un compromiso ya consignado económicamente desde el Ayuntamiento y que tendrá que acometer el nuevo ejecutivo socialista.