Elisa Reyes, la gaditana desempleada que volvió de Castellón a su Cádiz natal y que hace un par de semanas se encontraba sin vivienda, está alojada en una pensión de la ciudad que está costeando el Ayuntamiento gaditano a través de los Servicios Sociales. Según la afectada, la edil del ramo, Ana Fernández, se comprometía con ella a “que permaneciese en la pensión mientras encontraba una vivienda de alquiler, ya que estaba teniendo problemas con las inmobiliarias que no querían trabajar con el Ayuntamiento”. Con este compromiso de la concejala, Elisa Reyes se quedaba tranquila.
Sin embargo, cuando parecía que su situación empezaba a ver la luz, recibió una llamada de su asistenta social informándole que el día 11, el pasado lunes, debería haber abandonado la pensión en la que está alojada. Elisa Reyes se encuentra tan desesperada que afirma que “no me voy a ir de la pensión, la concejala se comprometió conmigo a que estaría ahí hasta que encontrara la vivienda y ahí voy a seguir”.
En cuanto a la casa que había localizado en el barrio de La Viña, cuyo alquiler se dejó en manos de la negociación de Servicios Sociales, al parecer, según Reyes, no ha llegado a buen término porque “no se puede alquilar”, aunque desconoce el por qué.
